Laguna de Busa (Foto: Juana Merchán) |
San Fernando es un hermoso sitio arqueológico, de belleza natural y con una extensa estructura arquitectónica a sus alrededores. Está ubicado a dos kilómetros de la cabecera cantonal del cantón San Fernando, y a una altitud de 2.765 m.s.n.m., donde se encuentra la Laguna de Busa.
La laguna cubre un área aproximada de 12 hectáreas, está ubicada a los pies del majestuoso cerro San Pablo y se halla rodeada de una rica vegetación y un sin número de piedras y rocas.
Busa, antiguamente se llamó Leoquina o lugar donde se sumergió la serpiente, pues ahí se dice tuvo lugar el mito de origen de la Confederación Cañari y varias leyendas sobre su aparición y tesoros escondidos dentro de sus aguas.
Según el mito, la serpiente que dio origen a los cañaris, después de procrear a su pueblo se sumergió en una laguna, la misma que ha sido ubicada en diferentes lugares del antiguo territorio cañari. Culebrillas en Cañar, Ayllón en Sígsig, Guabizhún en Déleg y Busa en San Fernando han sido identificadas como la laguna sagrada; pues los antiguos pueblos solían relacionar a la laguna de su jurisdicción como el lugar del mito. El encanto natural de Busa, convirtió a esta laguna en uno de los sitios sagrados para los cañaris.
Las leyendas cuentan que en las profundidades de la laguna se encuentran grandes tesoros en oro, plata y objetos valiosos hechos de la concha Spondylus.
Las leyendas cuentan que en las profundidades de la laguna se encuentran grandes tesoros en oro, plata y objetos valiosos hechos de la concha Spondylus.
Los muros de piedra se ajustan a las formas del terreno, ascienden desde el pie del cerro y alrededores de laguna, hasta las faldas del mismo. Su extensión no está determinada, en muchos casos, las rocas que formaban estos muros han servido para delimitar los sitios y propiedades de los pobladores del sector.
En las laderas del cerro San Pablo también se pueden encontrar cuevas de diferentes tamaños, hechas de rocas, que con el paso de los años se han cubierto de musgo y hojas de los árboles. Los moradores del sector han hallado varios materiales de piedra y cerámica; vasijas, hachas, morteros, que por su forma y antigüedad se las relaciona con las culturas aborígenes que habitaron el lugar, como cañaris e incas.
Ubicación